Comience explorando la capital de Eslovaquia, Bratislava, que se encuentra a los márgenes del río Danubio. Recorra su bello centro histórico y destacados edificios como el Castillo de Bratislava, que en la actualidad alberga el Museo Nacional, o el Antiguo Ayuntamiento, donde se ubica el Museo Municipal. Visite la catedral de San Martín o, para tener vistas de la ciudad, el mirador del Puente Nuevo. Con su alquiler de autos en Eslovaquia podrá conducir unos 13 km hacia el Castillo de Devín, un destacado centro arqueológico del país. Para recorrer otra zona del país, conduzca hasta Kosice, una ciudad joven y multicultural por sus universidades. Conozca el centro histórico en el que se hallan la catedral de Santa Isabel y el Teatro Estatal, o el Museo Arqueológico, ubicado en los túneles subterráneos, y el Museo del Este.