Luego de demostrar sus habilidades deportivas en las pistas de esquí trazadas entre pintorescos bosques, acérquese con su vehículo de alquiler hasta el barrio Kezhmarok, donde podrá visitar el antiguo palacio y la iglesia de estilo gótico. Recuerde que para su mayor comodidad, puede solicitar portaesquís o GPS, abonando un mínimo cargo extra.